Peñaranda en Común denuncia, una vez más, las malas prácticas del PSOE en materia de gestión de residuos orgánicos.

Hace apenas unos días la Junta de Castilla y León daba su  autorización, propiciado por  un cambio en las temperaturas, y concedía  permiso para que las entidades locales pudieran iniciar acciones de quema de rastrojos, poda y ramaje con el fin de dar una solución al actual problema de depósito o abandono, en diferentes espacios públicos, de este tipo de residuos derivados del cuidado y mantenimiento de las zonas verdes.

Ante estos hechos, Peñaranda en Común vuelve a reiterar su denuncia, como ya hicieran tres meses atrás, y reclaman una solución eficaz y sostenible para cualquier tipo de residuo que se genere en el municipio, y en este caso concreto para la materia de carácter orgánico. Así, la formación denunciaba este pasado mes de julio, la multitud de puntos dentro del municipio en los que, hasta el momento de su denuncia, eran abandonados los restos derivados de las acciones de poda y mantenimiento de zonas verdes, obteniendo el compromiso del equipo de gobierno de buscar una solución sostenible para gestionar este tipo de residuos y para terminar con el abandono indiscriminado de los mismos por parte de algunos vecinos.

Desde PeC señalan, “ las acciones de estos últimos días demuestran, a pesar del aparente compromiso mostrado en su día y siendo conscientes de que la Junta de Castilla y León autoriza poner en práctica este tipo de acciones, que no existe compromiso real por adoptar medidas inmediatas con las que  luchar contra el cambio climático tanto por parte de quienes conceden este tipo de permisos, en este caso el gobierno de la Junta de Castilla y León, como por parte de quienes las ejecutan” .

Argumentan, “ es absolutamente preocupante que tras nuestra denuncia la principal medida que haya adoptado el PSOE es trasladar el problema de un lugar a otro, convirtiendo el prado Horno en un nuevo vertedero municipal” , tal y como aparece reflejado en las fotografías aportadas por la propia formación.

Finalizaban, instando con premura al equipo de gobierno local a poner en funcionamiento el espacio municipal donde  gestionar de manera sostenible este tipo de materia orgánica. “La solución en la gestión para  este tipo de residuos orgánicos pasa por el astillamiento, descomposición y posterior reintroducción en forma de mantillo en las diferentes zonas verdes del municipio, que por supuesto nada tienen que ver con la quema u otro tipo de acciones absolutamente irresponsables”.